Me encanta el poder de personalización que permite el fieltro: ella es rubia, con un poquito de flequillo, y pude recrearle el peinado de una forma divertida. No tenía fieltro de color piel, pero creo que el morado le da un toque divertido a todo el conjunto y resalta más el blanco de la bata (¡que tiene sus bolsillitos y todo!).
Me parece un regalo diferente y con el que quedas como una reina. Eso sí, lleva mucho trabajo ya que primero realicé los patrones de todo, después cosí todo con punto de festón y punto normal, lo rellené con algodón (estaba blandita y rellenita) y por último le coloqué todos los detalles, como la cofia y una cruz roja en la espalda (no tengo foto de la parte posterior, ¡¡perdón!!).
¿Qué os parece? ¿Os animáis a hacer una muñequita personalizada?
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